Hasta que las máquinas
La
escuela humana
tiende
a la perfección
de
las almas.
Hasta
que las máquinas
sonrían
por nosotros.
City Bell, 25.06.13
Fino a che le macchine
La
scuola umana
tende
alla perfezione
delle
anime.
Fino
che le macchine
sorrideranno
per noi.
Batallas
crees
haber vencido
pero
en amor como
en
odio no hay
vencedores
todo
dolor
se comparte
solitariamente
1985
Battaglie
credi
di aver vinto
ma
nell’amore come
nell’odio
non ci sono
vincitori
ogni
dolore
si condivide
in
solitudine.
Guerra y paz
Cuando
entro a tu casa
dejo
mis armas
en
el pasillo,
y
descalzo
subo
la escalera,
para
hacer la guerra,
para
lograr la paz.
Guerra e pace
Quando
entro in casa tua
lascio
le mie armi
fuori,
e
a piedi nudi
salgo
la scala,
per
fare la guerra,
per
raggiungere la pace.
Son dos los que danzan
para Elena
No sé
por qué
si afuera llueve
elijo una música
diferente
En el adentro
los sonidos se besan
Son dos los que danzan
Sono due quelli che
danzano
per Elena
Non
so
perché
se
fuori piove
scelgo
una musica
diversa
all’interno
i
suoni si baciano
Sono
due quelli che danzano
Saberes
Sé
que soy
la
garra en la puerta
de
la jaula
y
soy el pájaro
que
se queda
en
un rincón
sin
querer salir
Saperi
So
di essere
l’
artiglio alla porta
della
gabbia
e
anche il passero
che
all’angolo resta
senza
volontà di uscire
El poder
El
poder de una palabra
no
radica en la voluntad
de
poder
decir
aquello
que
los demás
quieren
escuchar
El
poder de la palabra
es
un certero golpe
en
la cabeza del silencio
Y
de esa cabeza
–estallada
en el aire–
se
arma el mundo
a
imagen y semejanza
Il potere
Il
potere di una parola
non
sta nella volontà
del
potere
dire
quello
che
gli altri
vogliono
ascoltare
Il
potere della parola
è
un colpo preciso
sulla
testa del silenzio
e
di quella testa
–esplosa
per aria–
si
compone il mondo
a
immagine e somiglianza
Los pájaros de nuestra
memoria
Tal
vez el poema sea
un
campo dorado
a
la espera
de
la lluvia
Y
del viento
que
mece
los
árboles
donde
descansan
los
pájaros
de
nuestra memoria
I passeri della nostra
memoria
Il
poema può essere
un
campo dorato
in
attesa
della
pioggia
e
dal vento
che
culla
gli
alberi
dove
riposano
i
passeri
della
nostra memoria
Massera
Cuando
desperté
a
las cuatro de la tarde
de
un ocho de noviembre,
el
monstruo ya no estaba.
Massera
Quando
mi svegliai
alle
quattro di sera
dell’otto
novembre,
il
mostro non c’era più.
En
revista Isla Negra 10/389, casa de
poesía y literaturas,
octubre – 2014- año del Décimo aniversario.
Desde Sardegna, Italia. Dirección: Gabriel Impaglione.-
octubre – 2014- año del Décimo aniversario.
Desde Sardegna, Italia. Dirección: Gabriel Impaglione.-
Foto:
En Trieste, Italia, con la escritora Ana Cecilia Prenz Kopusar, mayo de 2013.-
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