MONITOS MUY MONITOS
El mono escribe x x x,
y festeja el amo.
Y cuando le pide “mové la cola”,
en honor a su amo,
mordisquea
una banana, cascarea en el
aire, y
con el humo de sus pedos
exhala un chillido odorífero
y espeso.
Por supuesto, termina en la
tapa
de un inodoro impreso en diario
papel.
.
Foto: estuche para
clarinete.
Lo esencial es invisible a los ojos del monito.
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